NO LO PUEDO CREER 

Cortador de pizzas con guía láser HOGARINVENTOS FRIKIS Anoche mismo me tuve que enfrentar con una de las fatalidades más denigrantes de la historia del ser humano: los cortes de las pizzas en porciones. Era una velada perfecta: alguien desplegó el tablero de Juego de Tronos, se repartieron las familias, me tocaron los Greyjoy, supliqué clemencia y me dispuse a perder sin dignidad. Lo hice. Pero en el transcurso de la partida llegaron las pizzas y todos los jugadores nos vimos en la obligación de dejar aparte nuestras tácticas para intentar dilucidar qué había pasado por la mente de la persona que cortó las pizzas. Vimos influencias de Kandinsky, ciertos trazos expresionistas y una clara tendencia por dejar el lienzo abocetado pero sin terminar, para que cada uno lo terminase como le fuera más sugerente. Decidimos terminarlo con un gesto artístico, una suerte de instalación, basada en destruir el panfleto de la pizzería en trocitos muy pequeños pero infinitamente más ordenados que lo que nos habían entregado. Más allá de la manía de las pizzerías por delegar, creo que todo iría bastante mejor si se hicieron con un cortador de pizzas con guía láser integrada. Infalible, certero, quirúrgico. Con la posibilidad de girar el láser y convertirlo en una linterna para seguir cortando pizzas en condiciones desfavorables (a las tres de la madrugada en lo alto de una noria, por ejemplo). Un artilugio que surge de la necesidad de las masas que quieren pizzas bien cortadas y de las masas que quieren ser bien cortadas.